Cómo manejar el conflicto entre padres divorciados por el bien de los niños

Cómo manejar el conflicto entre padres divorciados por el bien de los niños

El divorcio pude ser una de las transiciones más difíciles de la vida. Mientras que los adultos involucrados pueden sentirse agobiados emocional y logísticamente por sus consecuencias, sus secuelas afectan a los niños de manera profunda, lo cual significa que se vuelve imperativo que los desacuerdos entre los padres divorciados se manejen para garantizar que siempre se le dé prioridad al bienestar emocional de los niños. Este artículo expone estrategias diseñadas para mitigar y manejar los conflictos mientras se protege el bienestar emocional del niño durante esta etapa de transición.

1. Promover el bienestar emocional del niño por encima de todo.

Por encima de todo, la salud emocional se debe mantener como el objetivo central por los niños.

  • Enfoque centrado en el niño. Recuerde constantemente que el bienestar mental y emocional de los niños es frágil. Base sus decisiones y acciones en lo que más beneficie al niño, en vez de satisfacer los impulsos inmediatos de venganza y justificación.
  • Evite comentarios denigrantes. Los niños entienden más de lo que nosotros pensamos; por lo tanto, evite hacer comentarios negativos en contra del otro en frente de los chicos.
  • Demuestren el amor que sienten ambos padres hacia los niños. Dele garantía a los niños de que los dos los aman incondicionalmente a pesar de cualquier tensión marital que exista en casa.
  • Busque orientación. Involucrarse en una terapia familiar, o de orientación, puede ofrecer un mecanismos de afrontamiento y le da al niño un espacio seguro para expresar sus problemas.
  • Mantenga las rutinas. Para la mayor tranquilidad y estabilidad del niño, intente y cree rutinas regulares que vayan desde los rituales de la hora de dormir hasta los eventos del fin de semana para darle estabilidad a la rutina, lo cual aporta la sensación de seguridad esencial.

2. Técnicas de comunicación efectiva.

Una comunicación abierta, honesta y no hostil es el pilar fundamental para la resolución de conflictos.

  • Sea neutral durante las discusiones. Cuando se involucre en discusiones, intente elegir terrenos neutrales libres de recuerdos o tensines del pasado, como  una cafetería o parque cercano al lugar donde se llevará acabo la reunión.
  • Escuche activamente. Esté atento y enfoque su atención en escuchar sin interrumpir. Escucharse entre sí puede ayudar a aliviar la tensión durante una situación de disputa.
  • Utilice una afirmación en primera persona. En lugar de acusar a otros por no recoger a los niños a la hora, declare: «Me siento abrumado cuando a mis niños no los recogen de acuerdo a lo planeado».
  • Absténgase de jugar los juegos de culpas. Evite jugar los juegos de culpa y enfóquese en la resolución del problema en vez de hacer acusaciones. Discuta las acciones y las consecuencias en lugar de discutir los defectos de carácter.
  • Considere la mediación. Cuando la barrera de la comunicación persiste, considere los servicios de mediación como vía hacia la discusión productiva. Una tercera parte que sea imparcial puede ayudar a guiar las discusiones hacia resultados importantes.

3. Establecer límites claros

La definición de los límites puede reducir los conflictos al fijar expectativas claras.

  • Respeto a la privacidad. Evite entrometerse en la vida personal del otro padre, a menos que eso repercuta directamente en los niños.
  • Establezca agendas. Es prudente  establecer previamente las visitas, los planes de recoger y  dejar para reducir los puntos de controversia entre los visitantes, los que recogen y los que dejan.
  • Acuerdos financieros. Proporcione directrices claras con respecto a las finanzas para reducir las disputas por dinero.
  • Protocolos de toma de decisiones. Antes de tomar decisiones importantes, como la inscripción en el colegio o los procedimientos médicos, desarrolle un protocolo acordado para que ambas opiniones sean tomadas en consideración.

Si la interacción se vuelve consistentemente hostil, limite las comunicaciones directas mediante el empleo de herramientas como las aplicaciones de paternidad compartida para coordinar la logística y limitar frontalmente las interacciones directas.

4. Cultive la salud emocional 

Su bienestar tiene un efecto directo en el bienestar de sus hijos.

  • Busque orientación individual. La terapia le puede ofrecer estrategias para la regulación emocional.
  • Establezca sistemas de apoyo. Reconfórtese conectándose con amigos, familiares y grupos de apoyo dedicados a los padres divorciados para conseguir orientación y consuelo. Compartir experiencias puede ofrecer buenas perspectivas.
  • La importancia del autocuidado. Involucrarse en actividades de autoayuda tales como la meditación, los ejercicios o la lectura pueden ayudar a bajar los niveles de estrés y mantener el equilibrio emocional.
  • Evite las relaciones de rebote. Iniciar otra relación demasiado rápido puede añadir incluso más complicaciones. Primero, tómese el tiempo para sanar y reflexionar antes de comenzar una nueva relación.
  • Acepte y perdone. Comprenda que ambos participaron en la causa del rompimiento. La aceptación y el perdón, incluso cuando no se expresan verbalmente, son estrategias efectivas para  aliviar cualquier presión interna que se ha acumulado entre ustedes.

5. Promoción de un enfoque de paternidad compartida

La paternidad requiere de la cooperación a pesar del divorcio.

  • Disciplina consistente. Asegúrese de que las medidas disciplinarias, recompensas y consecuencias sean uniformes en ambos hogares.
  • Haga un homenaje por los logros. Las metas que alcanzan los niños, sean académicas o de naturaleza personal, deberían celebrarlas juntos y conmemorarlas apropiadamente.
  • Mantengan un frente unido con los asuntos fundamentales. Mantengan una posición unitaria para las decisiones importantes, como las opciones de educación y asistencia médica, como tomar juntos decisiones informadas. 
  • Compartir calendarios. Por el beneficio de las dos partes involucradas, asegúrese de que ambos estén al tanto de las actividades de los niños mediante el uso compartido de los calendarios, de manera que nadie se pierda de ningún evento esencial. 
  • La discusión regular acerca del progreso de los niños, los desafíos o los cambios pueden mantener a ambos padres informados y mantener los canales de comunicación despejados y eficientes.

6. Fomente la relación de los niños con ambos padres

Los niños tienen el derecho de formar lazos con sus padres a pesar de las diferencias que puedan existir entre ellos.

  • Facilite las visitas. Garantícele a los niños pasar tiempo de calidad de manera sistemática con ambos padres.
  • Evite el chantaje emocional. No utilice a los niños como herramienta de chantaje emocional y ventaja para obtener ganancia personal.
  • Fomente la amplitud. Permita que los niños tengan la libertad de compartir la experiencia de pasar el tiempo con cualquiera de los padres sin el temor a ser juzgado por alguna de las partes.
  • Reconozca la importancia. Reconozca que el beneficio para los niños que resulta de una relación fuerte y armoniosa entre los padres es vital para apoyar el desarrollo holístico de cada uno de ellos.
  • Aborde las preocupaciones diplomáticamente. Si los niños expresan dudas acerca de uno de los padres, hágales frente sin hostilidad o sesgo.

7. Acepte la flexibilidad y adaptabilidad

La naturaleza impredecible de la vida implica que no siempre sea práctico adherirse exactamente a los planes. Hay que tener la mente abierta en cuanto a que la flexibilidad puede con frecuencia ayudar a evitar potenciales situaciones de conflicto.

  • Haga ajustes para las ocasiones especiales. Acepte que las ocasiones especiales, como los cumpleaños, reuniones familiares y los eventos escolares pudieran requerir cambios en la agenda. La colaboración en estos momentos demuestra madurez.
  • Actitud receptiva ante los comentarios. Mantenga la mente abierta si el otro padre sugiere cambios con base en las necesidades de evolución del niño o niña. Su perspectiva pudiera proporcionar nuevos aspectos que antes no se le habían cruzado por la mente.
  • Anticipe los cambios. A medida que los niños maduran, sus gustos y necesidades cambian de acuerdo a su edad. Por ejemplo, cuando pasan más tiempo socializando o participando en actividades extracurriculares. Cuando sea necesario adapte su agenda.
  • Planes de emergencia. Establezca protocolos de emergencia para que ambos padres estén informados y puedan cooperar sin crear conflictos entre ellos.
  • Revisiones regulares. Realice revisiones de los planes de paternidad compartida y arreglos, pues lo que hoy funciona pudiera no ser óptimo dentro de doce meces.

8. El papel de la tecnología en la paternidad compartida.

El uso de la tecnología puede facilitar significativamente el proceso de la paternidad compartida y minimizar los potenciales puntos de controversia.

  • Aplicaciones de paternidad compartida. Las plataformas como «2houses Calendar» ofrecen herramientas para compartir calendarios, seguimiento de los gastos y mensajería para optimizar la coordinación y reducir el conflicto.
  • Visitas virtuales. Cuando las visitas de los padres no se pueden dar físicamente, las videollamadas proporcionan el puente perfecto para que los niños permanezcan cerca de cada uno de los padres.
  • Álbumes digitales compartidos. Las plataformas tales como «Google Photos» hacen posible que los padres y niños por igual colaboren en la creación de álbumes digitales compartidos acerca de los logros y alegrías cotidianas y así cada uno de los involucrados se mantiene al tanto de los momentos más importantes de la vida.
  • Orientación y terapia en línea. Para los padres que no pueden asistir a las sesiones de terapia en persona, muchas plataformas proporcionan orientación en línea como solución viable para dar guía y asistencia cuando sea necesario.
  • Aplicaciones educativas. Las plataformas diseñadas para hacerle seguimiento al progreso académico, tales como portales para los padres o aplicaciones educativas, pueden proveerle a ambos padres información actualizada sobre la trayectoria académica de sus niños.

Conclusiones

Navegar a través de las interacciones posdivorcio puede ser difícil; sin embargo, es vital que ambos padres se enfoquen en darle prioridad al bienestar de los niños como brújula para la acción. Mediante la adopción de estrategias de comunicación efectiva y la fijación de límites claros, mientras que se garantiza la salud emocional personal y la promoción de un enfoque en la paternidad compartida unificada al igual que fomentar las relaciones entre los dos padres y sus hijos, las parejas divorciadas pueden impulsar una atmosfera donde los niños puedan florecer a pesar de los restos de un matrimonio roto que se queda dentro. Es posible cultivar el entendimiento, la colaboración y el mutuo respeto mientras se cultivan las relaciones de los niños que, a cambio, ayuden a crear una experiencia de aprendizaje ideal.

Cómo equilibrar las responsabilidades parentales y el trabajo como un padre divorciado

Cómo equilibrar las responsabilidades parentales y el trabajo como un padre divorciado

La crianza es un trabajo de tiempo completo en si misma, pero muchos padres también malabarean con las carreras fuera de casa. Padres divorciados o separados que tienen niños con quiénes pasan tiempo, podrían tener dificultades para poder encontrar un buen balance entre la vida y el trabajo.

Es posible ser un empleado comprometido sin dejar de ser un padre involucrado, si eres consciente e intentas mantener este balance tomando medidas que te ayuden. Piensa en estas sugerencias para manejar mejor tu tiempo entre el trabajo y ser un padre. 

Haga sus prioridades claras

Comunique claramente sus prioridades a su empleador, para que este pueda respetar su necesidad de pasar tiempo con sus hijos. Si lo necesitaran para trabajar más horas, puede dejarles saber cuándo esté y cuando no esté disponible, basado en su agenda como padre.

Usted y su empleador pueden negociar los tiempos que necesitara estar ausente del trabajo, para situaciones como reuniones de padres y docentes, o citas médicas de sus niños. 

Tal vez necesite buscar un nuevo trabajo que te provea con la flexibilidad necesaria si su compañía actual no puede trabajar como necesita.

No se deje tragar por la culpa

Deprimirse porque no es capaz de satisfacer todas las necesidades de sus niños no le sirve ni a usted ni a sus hijos. La realidad es que usted probablemente esté contribuyendo financieramente a el bienestar de sus hijos con su carrera. 

Padres que trabajen pueden usar sus salarios para necesidades como alimentos, abrigo y un hogar. También puede usarlo para lujos como actividades extracurriculares, fondos universitarios, y vacaciones familiares.

Algunos días, usted podrá dedicar más energía a sus hijos, mientras que, en otros, usted necesitará concentrar toda su atención en su trabajo. Aunque trabaje desde casa, tampoco podrá dedicar su completa atención a sus hijos las veinticuatro horas del día, siete días a la semana.  

Sea eficiente con su tiempo 

Mantener una vida saludable requiere priorizar la crianza y la familia. Evite distracciones y concéntrese en sus objetivos. Deje el teléfono y pase tiempo con sus niños. 

Si sus padres están separados o divorciados, este es un gran momento para pasar tiempo con otra gente y planear comidas para varias semanas. Esto garantizará que todos coman bien, y reduce el estrés de alimentar una familia.

Sea flexible

Usted y su ex tendrán ambos trabajos e hijos demandantes, pero como padres, tendrán que contar con el otro para apoyarse cuando la situación lo requiera. 

Por ejemplo, si la madre de su hijo repentinamente necesita estar más horas en la oficina, usted puede hacerse cargo de él, mientras construye un espacio para pensar como lidiar con su vida laboral y la crianza.

Discuta sentimientos

Después de un divorcio o separación, no es inusual para cada niño, madre y padre, sentirse indefensos y con miedo. Sentimientos como estos necesitan ser discutidos. Poner las emociones de uno en frases es un excelente primer paso. Las emociones junto a el diálogo pueden ser avivadas leyendo un libro, mirando algo juntos, o jugando un juego. 

Adicionalmente, madre y padre pueden tomar ventaja de hablar de sus emociones con un amigo cercano, un terapista, o escribiendo un diario personal. Al entender mejor sus sentimientos, el padre y la madre pueden ser más confiables y presentes con sus hijos. 

Como los hijos pueden experimentar tener dificultades determinando esas cosas, lo inteligente sería buscar por ayuda experta o asesoramiento profesional.

Reflexione sobre memorias positivas 

Puede hacer tiempo para conectar con sus hijos mediante experiencias compartidas. El divorcio afecta tanto a los padres como a los hijos. Recuerde planear algo de diversión familiar. Esto mejorará enormemente los sentimientos de amor y apoyo durante los tiempos difíciles.

Los padres pueden lograr esto organizando juegos nocturnos por las semanas o en días festivos. Crear experiencias felices con sus hijos es una gran estrategia para superar los recuerdos del divorcio.

Sus hijos podrán tener dificultades con estos cambios desafiantes, y tal vez no se diviertan tanto como lo hacían antes. Priorizar buenas memorias previene bloqueos emocionales.

Busque ayuda

Los padres divorciados a veces sienten que tienen que hacer más para compensar con la ausencia del otro padre en sus vidas. Esto no puede ser así. 

Es importante para los padres separados o divorciados que se concentren en lo que pueden hacer por sus hijos, no en lo que no pueden hacer. Ayuda que discutan abiertamente las fortalezas de cada uno cuando decidan como dividirse las tareas. 

Los padres que se están divorciando deben recordar que son personas, y que no deben avergonzarse en pedir por ayuda. 

Ambos padres se necesitan el uno a otro porque ninguno puede manejar todo por si mismo. Investigue si hay iniciativas del gobierno para ayudar a padres separados a tener apoyo para sus hijos. Tampoco sean tímidos en hablar con un terapeuta.

Reserve tiempo para sí mismo 

En adición a mantener un sano balance entre trabajo y vida familiar, usted debe priorizar su propio bienestar físico y mental. Preste atención a su familia cuando es tiempo familiar, a su trabajo cuando esté trabajando, y en usted mismo cuando tenga tiempo libre.

Puede mantener su felicidad y salud haciendo cosas que disfrute, como pasar tiempo con seres amados, o con otros padres solteros.

Conclusión

Descubrir un método para manejar las demandas de su profesión y familia será una buena inversión de su tiempo y esfuerzo. Aproveche la oportunidad de pasar tiempo de calidad con sus hijos, tanto en el trabajo como en su casa, sin tener ninguna culpa.

Asegúrese de programar y prepararse meticulosamente para todos sus compromisos. En última instancia, nunca pase por alto la importancia de su bienestar físico y mental. Al integrar todas estas estrategias, usted mejorará su capacidad para armonizar su trabajo y su vida personal.

Explorando Los Efectos Del Divorcio En El Desempeño Académico De Los Niños

Efectos Del Divorcio En El Desempeño Académico De Los Niños

El impacto del divorcio en los logros académicos de los niños es una preocupación mayor. Apoyar a los niños durante este difícil momento, es crucial para entender cómo el divorcio afecta su estudio.

Los niños que han vivido divorcios pueden tener peor desempeño académico, de acuerdo con estudios. El divorcio puede inducir malestar mental, el cual puede perjudicar la concentración de un niño, la vida académica y su desempeño.

Las dinámicas familiares y situaciones del hogar después del divorcio pueden también estresar a los niños. Ellos de pronto tendrán que cambiar de colegio, rutinas, y situaciones del hogar. Las interrupciones pueden hacer más difícil para ellos el estudiar y desempeñarse bien.

Padres, educadores, y profesionales deben notar los problemas académicos de los niños que atraviesan el divorcio. Entender esas consecuencias permite apoyar las estructuras a usar para reducir su impacto educativo.

Podemos crear un ambiente que desarrolle resiliencia y equipe a los niños para el éxito a pesar de sus problemas, investigando y discutiendo las consecuencias del divorcio en el desempeño académico.

¿Qué es el divorcio?

Un divorcio es una separación formal por medio de jueces u otras autoridades. La custodia del niño, soporte financiero, y acuerdos de visita para niños menores son estipulados en el divorcio. La decisión para divorciarse puede parecer simple, pero la pareja de esposos raramente está de acuerdo. Ellos lo intentan un largo tiempo antes de terminar. A veces las personas deciden que el divorcio es la única opción después de haber intentado todo lo demás. 

Aunque inevitable, el cambio puede ser especialmente difícil para aquellos cercanos a ti en el hogar. Un padre busca el divorcio, o ambos. Incluso si un padre quiere el divorcio, ambos padres están desconsolados por el fin del matrimonio. Los niños pueden estar indispuestos cuando un padre deja el hogar. 

Difícil no tomarlo personal. Cuando un esposo decide divorciarse, los padres se van de la casa, no porque no les interese más sus hijos. A las personas jóvenes les disgusta la separación de los padres. Los niños que oyen que sus padres no son felices pueden tener una mezcla de sentimientos. Algunos niños encuentran el divorcio como un alivio, en especial si sus padres peleaban mucho.

Recuerda que el divorcio de tus padres no significa que ya no tengas una relación con ellos. En cuanto al tiempo. Esto siempre es cierto.

Falta de Socialización

La importancia de la unidad familiar es enfatizada en el salón de clases. Desafortunadamente, esta información puede llevar a otros niños a creer que es inaceptable tener un hogar disfuncional. Los niños que atraviesan el divorcio pueden distanciarse de sus pares como resultado.

Ellos se pueden empezar a sentir nerviosos o avergonzados. Esos niños también pueden desarrollar ansiedad social como resultado de sus experiencias. Especialmente con los jóvenes que por el contrario son sanos y libres de problemas. 

Los padres divorciados pueden tener efectos duraderos en sus hijos, no solo académicamente. Hay un riesgo de que estos niños tendrán serias reservaciones acerca del matrimonio y empezar una familia.

Reducción de la Motivación para Estudios Posteriores

Los niños sufren mucho a causa del divorcio. Las familias separadas han sido asociadas con pobres resultados académicos en sus hijos. No es sorprendente, considerando cómo un niño atrapado en medio de un divorcio puede ser presionado a elegir bandos, desarraigados, y sujetos a comentarios dañinos acerca de uno o ambos padres. La motivación del niño para aprender puede verse afectada como resultado de esto. 

Dificultad para entender

La psicología de un niño puede ser bastante afectada por el divorcio. Como resultado de lo que ellos están atravesando, están indispuestos, tristes, deprimidos, y confundidos. Estudios muestran que esto contribuye a una alta prevalencia de problemas de TDA e hiperactividad entre niños de divorcios. 

Investigaciones muestran que para el tiempo en el que tengan 13, los niños de padres divorciados están medio año por detrás de sus compañeros con hogares intactos cuando se trata de comprensión lectora y muchos de esos niños también tuvieron un peor desempeño que sus contrapartes con padres casados en matemáticas, historia y ciencia. Un año de detención es aún más común.

Problemas en el comportamiento

No importa cómo un niño se desarrolle, ellos inevitablemente tendrán dificultades en la escuela. Las posibles razones incluyen presión de sus compañeros, falta de entendimiento mutuo, o enredo emocional.

Sin embargo, no hay negación alguna del devastador impacto de la separación en la salud mental de los niños. Esto puede llevar a problemas de comportamiento y ausencias en la escuela en personas jóvenes. Los estudiantes cuyos padres estaban divorciados o separados abandonaron la escuela en casi el doble de la tasa de sus compañeros. Esto podría ser un indicador de la falta de interés en el trabajo de la escuela o una forma de obtener la atención de sus padres.

Perspectivas reducidas para la educación superior

Solo el 27% de los hijos de divorcios o separaciones obtiene un título profesional. Este inconveniente tiene varias causas. Puede que hayan abandonado la secundaria o no podían costear la universidad como hijos de un padre soltero. 

Alteraciones en la alimentación y horarios de sueño

Un estudio en 2019 miró el impacto del divorcio en la salud mental y la felicidad de los niños. El divorcio puede no afectar inmediatamente el IMC de los niños, pero está asociado con un aumento “significativo” del riesgo de obesidad comparado con niños cuyos padres aún están juntos. Los niños que experimentan la separación antes de los seis años son muy vulnerables a tener ese efecto.

Niños de todas las edades por lo general tienen problemas sexuales, problemas que pueden llevar a la obesidad. Ansiedad antes de dormirse, pesadillas recurrentes, y creencias en monstruos y otras criaturas míticas son todos signos de retroceso. 

Cómo Ayudar a los Niños a Triunfar Durante el Divorcio de Sus Padres

En conclusión, el divorcio puede afectar negativamente los logros académicos de los niños. Motivación disminuida, tensión, y atención pueden afectar el desempeño académico de los niños después del divorcio.

Nótese que no todos los jóvenes tendrán los mismos síntomas. La edad, el género, y la resiliencia afectan cómo un niño maneja el divorcio.

Para reducir los efectos perjudiciales del divorcio en el desempeño académico, padres y educadores deben proporcionar apoyo emocional y una atmósfera segura. Comunicación abierta, terapia, y rutinas pueden lograr esto.

Al proporcionar consejeros de orientación entrenados para manejar problemas emocionales y programas específicos o grupos de apoyo, las escuelas también pueden ayudar a los niños que atraviesan el divorcio.

Al abordar de manera proactive estas variables y proporcionar niños con apoyo familiar y escolar, podemos reducir los efectos dañinos del divorcio en el desempeño académico. Cada esfuerzo debe hacerse para priorizar el bienestar y desempeño educativo de los niños navegando este difícil cambio de vida. 

Analizando los desafíos a los que se enfrentan los padres divorciados en EEUU

Analizando los desafíos a los que se enfrentan los padres divorciados en EEUU

El divorcio puede traer consigo muchas dificultades que te ponen la vida patas arriba, sobre todo entre padres divorciados en los EEUU, quienes a menudo se encuentran luchando contra las dificultades que principalmente se ignoran en el discurso público. Este artículo ofrece una visión sobre los principales obstáculos que afrontan los padres divorciados en Estados Unidos tras el matrimonio – ofreciendo una comprensión integral sobre este tema tan complicado.

1. La Batalla por la Custodia

Los padres divorciados tienen que librar una dura batalla por sus derechos de custodia después del divorcio. Los tribunales suelen adjudicar la custodia primaria a las madres más a menudo, perpetuando el sesgo sistémico al respecto.

  • Antecedentes Históricos: Los tribunales familiares seguían tradicionalmente la doctrina de los “años tiernos” en cuanto a decisiones de custodia, dándole preferencia a las madres. Aunque esto se ha vuelto menos relevante hoy en día, su sesgo residual aún tiende a afectar en las resoluciones.
  • Demostrando la Competencia Parental: Los padres a menudo necesitan esforzarse el doble para demostrar que son unos cuidadores competentes tanto como las madres, llevándoles a sentirse discriminados e injustamente tratados por la sociedad. Esta dura batalla les puede hacer sentir marginados por la sociedad en general.
  • Haciéndose camino por el Sistema Judicial: Sin la orientación ni la correcta ayuda, entender todas las complejidades sobre Derecho Familiar y derechos puede ser abrumador, normalmente desencadenando a resultados menos favorables para los padres.
  • Estabilidad Financiera: La recepción de unos ingresos dispares entre los progenitores puede tener influencia sobre las decisiones de custodia en las resoluciones, sobre todo cuando hay una obvia desigualdad en los roles de género cuando se trata de obligaciones de ser el sostén de la familia.
  • Efecto en los Niños: Los divorcios pueden tener graves repercusiones para los hijos; los niños a menudo se sienten forzados de elegir a un progenitor sobre el otro cuando, en realidad, ninguno de los dos los quiere esto en su vida. 

2. El Estrés Financiero

Después del divorcio, los padres se enfrentan a un estrés financiero inmediato y a largo plazo.

  • La Pensión Alimenticia y la Manutención: Los pagos obligatorios pueden llevar al límite el bolsillo del padre y las sanciones por el incumplimiento de los pagos añaden una carga financiera más.
  • Reestructuración Financiera: Los padres a menudo necesitan adaptarse a vivir con un ingreso único, cambiando drásticamente su estilo de vida para vivir de manera cómoda.
  • Gastos Legales y Procedimientos judiciales: Los trámites de divorcio pueden añadir más carga financiera, forzando a los padres a reestructurar aún más su estilo de vida para sobrevivir financieramente.
  • Estabilidad Laboral y Ahorros para la Jubilación: El divorcio puede afectar significantemente al rendimiento laboral y a la estabilidad ya que los procesos legales consumen tus recursos personales y tu tiempo.
  • Ahorros para la Jubilación: El divorcio puede tener una drástica repercusión en tus ahorros para la jubilación ya que los bienes suelen ser divididos entre ambos cónyuges durante la separación de bienes.

3. El Impacto Emocional y la Salud Mental

El divorcio a menudo genera complicaciones tanto psicológicas como financieras que han de gestionarse cuidadosamente para que se resuelvan de manera satisfactoria.

  • Pérdida de la Estructura Familiar: El divorcio o la separación puede hacer sentir a los progenitores desconectados de su rutina familiar y a causar sentimientos de soledad y dolor.
  • El Estigma sobre la Expresión Emocional: Las expectativas culturales entorno a el estoicismo masculino puede desanimar a los padres de buscar ayuda psicológica a través de terapia o grupos de apoyo.
  • Depresión y Ansiedad: El divorcio a menudo acarrea estrés y agitación, provocando problemas de salud mental como la depresión o la ansiedad; también sentimientos de desesperación post-divorcio pueden surgir como consecuencia.
  • Pérdida de Autoestima y de Identidad: Los padres divorciados pueden sentirse desamparados, ya que la separación o el divorcio resuena durante sus vidas, a menudo sufriendo cambios que afectan a la autoestima y a la identidad como consecuencia.
  • La Relación Padre-Hijo: Mantener lazos fuertes con visitas limitadas o  vínculos escasos entre tú y los niños puede suponer un reto, así que mantener esos fuertes lazos se convierte en algo esencial para tu bienestar.

4. Haciéndose camino en la Co-Paternidad

Una co-paternidad satisfactoria tras el divorcio requiere respeto y cooperación mutua entre todos los involucrados, dos cualidades que a veces pueden ser un reto durante estos procesos cargados de emociones.

  • Problemas de Comunicación: Los malentendidos y los conflictos pueden crear una atmósfera desagradable entre las familias, el cual afecta negativamente a los niños.
  • Estilos Contradictorios de Paternidad: La divergencia en la manera de criar a los hijos puede resultar en la confusión para las jóvenes víctimas, además de estrés en todas las partes involucradas.
  • Adaptarse a Nuevas Parejas: Gestionar las nuevas parejas de tu ex mujer puede generar más angustia y conflicto.
  • Distanciamiento: Vivir lejos de los hijos puede ser un reto para las visitas y limitar la calidad de la relación mientras se van haciendo mayores.
  • Planificación de Vacaciones y Festividades: Organizar tus viajes puede crear tensión.

5. Percepción y Sesgo Social

El sesgo social hacia los padres divorciados agrava las dificultades existentes.

  • Estereotipos Negativos: Los medios de comunicación  tienden a retratar a los padres divorciados de una manera negativa, lo que puede afectar negativamente a sus relaciones sociales y a sus oportunidades profesionales.
  • Aislamiento Social: Los padres divorciados pueden sufrir un aislamiento social debido al estigma, o pérdida de amigos en común tras el divorcio.
  • Los Prejuicios en la Empresa: Las empresas pueden sentir prejuicios hacia los padres divorciados, lo cual pone trabas en el progreso y las oportunidades de ascenso laboral.
  • Los Prejuicios en el Sistema Educativo: Los profesores y administradores de los centros educativos pueden preferir inconscientemente comunicarse con las madres más que con los padres en cuanto a cuestiones de educación de los hijos, haciendo más difícil la participación de los padres.
  • Prejuicios Legales: La percepción social negativa a menudo contribuye a prejuicios legales en los tribunales familiares, haciendo así más difícil a los padres conseguir la custodia o derechos de visita.

6. Comenzar Nuevas Relaciones

Empezar de nuevo puede ser especialmente duro para los padres divorciados. Retomar el tener citas puede ser abrumador para este grupo de individuos.

  • Presentarle las Nuevas Parejas a los Hijos: Esto es a menudo complicado y requiere reflexión antes de ir más allá o hacer presentaciones entre los miembros de la familia o entre ambos adultos, ¡y ha de hacerse con cuidado para no incomodar a nadie!
  • Carga de las Anteriores Relaciones: Los problemas sin resolver de relaciones anteriores pueden permanecer en otros nuevos, mientras
  • Aceptación de los Niños: Los niños puede que encuentren difícil aceptar a las nuevas parejas de los padres y causar tensión y conflicto en casa.
  • Encontrar el Equilibrio: Encontrar el equilibrio justo entre ser padre y la búsqueda del romance requiere hacer malabares de manera constante.

7. Progreso en la Trayectoria Profesional

El divorcio puede afectar al progreso en la trayectoria profesional y tener repercusiones devastadoras para la vida profesional de cualquier padre y avances en la carrera.

  • Desempeño laboral: Los procesos de divorcio y sus consecuencias pueden afectar al desempeño laboral de manera negativa, con consecuencias que afectan a los empleados en el lugar de trabajo.
  • Progresos/Oportunidades Profesionales: Debido a los acuerdos de custodia/visitas, el progreso profesional puede volverse complicado cuando surgen las oportunidades de traslado.
  • Conciliación Trabajo-Vida: Los padres pueden encontrar dificultades dando en el blanco con el equilibrio entre el trabajo y la vida mientras gestionan trabajo, procedimientos legales y obligaciones de cuidado de los hijos de manera simultánea.
  • Presiones Económicas: Es posible que también haya presión por parte de la familia y/o del sistema judicial por el aumento de los ingresos para cubrir la manutención, lo cual desencadena en trabajo excesivo.
  • Estigma en el Lugar de Trabajo: Los padres divorciados pueden encontrar estigmas de manera inconsciente por parte de los compañeros de trabajo, lo cual afecta negativamente a éstas relaciones y a las oportunidades de crecimiento laboral.

Conclusión:

Los padres divorciados pueden enfrentarse a numerosos obstáculos que han sido arraigados en la sociedad y sus normas, sus precedentes legales y estructuras financieras. Entender estas dificultades es el primer paso para confeccionar políticas más justas y actitudes sociales que apoyen el objetivo de los padres divorciados de proporcionar a sus hijos lo mejor posible.

Cómo sobrellevar la separación: consejos para padres divorciados en España

Cómo sobrellevar la separación

La separación o el divorcio pueden llegar a ser situaciones estresantes o traumáticas, en especial cuando hay hijos en la pareja. Al daño emocional del fracaso afectivo se añade tener que gestionar un nuevo tipo de relación con esa persona, ya que los hijos son un vínculo que mantiene unidas a esas dos personas para siempre. Ante esta circunstancia, lo más sensato es tratar de crear una atmósfera de colaboración y respeto entre los progenitores. Una vez finalizada la relación sentimental, llevar el conflicto más allá solo perjudica a los niños.

Dado que ellos son y deben ser siempre la máxima prioridad, aquí van algunos consejos para padres divorciados que pueden ayudar a que todo sea más fluido entre las distintas partes implicadas.

Comunicación y respeto: las claves para que todo funcione

En muchos casos el motivo de la ruptura entre los padres se ha debido a no cumplir con estos preceptos. Es fundamental, por tanto, no repetir este error en la nueva etapa que se inicia. La base de cualquier relación saludable es una comunicación abierta y respetuosa, por lo que, si con anterioridad los padres no fueron capaces de comunicarse adecuadamente entre sí, ahora tienen una nueva oportunidad de hacerlo. Reincidir en la hostilidad que les llevó a finalizar su relación sentimental solo sirve para que los niños crezcan en un entorno de incertidumbre y temor.

No es fácil que dos personas cuya separación está reciente y que aún tienen heridas emocionales el uno respecto al otro cambien de repente su manera de comunicarse, pero para romper con esa dinámica perjudicial que les ha llevado al fracaso como pareja, deben considerar el bienestar de los hijos como su prioridad absoluta. De otro modo, no solo se habrán hecho daño ellos mismos, trasladarán ese sufrimiento a aquellos que más quieren.

Los hijos deben mantenerse lejos de cualquier drama que rodee al proceso de separación, y esto debe mantenerse en el tiempo una vez ya es efectiva. Deben sentir que sus padres están ahí siempre para prestarles un apoyo incondicional y a la vez percibir, incluso en las actitudes más insignificantes, que sus padres se respetan entre sí.

Adaptarse a los cambios

Una separación implica tener que adaptarse a una rutina totalmente diferente. A veces será uno quien tenga a los niños en casa, y a veces será el otro, y cada uno de los progenitores tiene que empezar a organizar su vida para que esto sea así. Quizás alguno de ellos sienta que no pasa el tiempo suficiente con los hijos, pero lejos de hacer de ello un motivo de disputa, en lo que deberá enfocarse es en que sea tiempo de calidad.

También los padres deben aprender a aprovechar el tiempo en el que no ejercen como tales. Quedarse en casa sin hacer nada, y pensando en cómo estarán los niños cuando están pasando tiempo con su padre o madre no es la mejor idea. Hay que aprender a diferenciar entre el tiempo que se les dedica y el que deben dedicarse a ellos mismos. Tras una relación rota, hay que empezar a recomponer los pedazos y volver a construir una vida nueva, y eso implica relacionarse o llevar a  cabo actividades que resulten satisfactorias. Todo ello ayuda también a rebajar notablemente los niveles de estrés que suelen ser muy elevados en las primeras etapas tras la separación.

Evitar actitudes que puedan dañar a los hijos

Aunque nunca se pretenda hacer daño a los hijos, hay actitudes de los padres que tienen ese efecto. En muchos casos los progenitores tienen una relación tan deteriorada que no pueden cruzar palabra sin terminar discutiendo. Cuando los hijos son testigos de estos enfrentamientos se les está causando un gran perjuicio.

Para solucionarlo, en ocasiones se utiliza a los propios hijos como transmisores de cualquier tipo de mensaje. Esto también es un error, ya que enviamos a los hijos el mensaje de que sus padres se odian hasta el punto de no poder tener una comunicación directa y necesitarlos a ellos como intermediarios.

Debe evitarse también cualquier tipo de manipulación emocional. Comentarios con los que los hijos se puedan sentir culpables por haber disfrutado con su padre o madre o comparaciones entre su trato con cada uno de ellos lo único que conseguirán es sumir a los hijos en una mayor angustia. Si los hijos asimilan que pasar buenos momentos con uno es equivalente a herir al otro, al final terminarán por alejarse de ambos.

Buscar el apoyo de profesionales

No hay que sentirse mal por buscar ayuda externa. La separación puede ser un proceso abrumador en muchos sentidos, y no todo el mundo tiene la capacidad de gestionar la tormenta de emociones que provoca.

Al igual que para el proceso legal las partes se ponen en manos de abogados y juristas, par la etapa inmediatamente posterior, la que implica empezar a diseñar un nuevo tipo de vida diferente a la etapa anterior, contar con la ayuda de profesionales expertos puede ser de gran utilidad.

Así, por ejemplo, en lugar de tener que estar siempre discutiendo por la organización de las actividades de los hijos o las cuestiones económicas, una plataforma como 2houses proporciona las herramientas para facilitar la comunicación de ambos progenitores. Llevar un control centralizado de los gastos que generan los hijos para un reparto más equitativo de estos o poder acceder a un calendario donde poder estar al tanto de sus actividades son algunas de las ventajas que proporciona  el servicio.

Conclusión

Sobrellevar la separación de la forma más civilizada posible es la mejor forma de conseguir el bienestar de los hijos. Una comunicación abierta, honesta y respetuosa, entender que se abre una nueva etapa diferente y saber adaptarse a los cambios que se producen y poner a los hijos como prioridad, evitando que salgan dañados por actitudes de los padres son los aspectos más importantes  a tener en cuenta. Cada familia es única y diferente, pero los problemas a los que se enfrentan los padres divorciados en España son casi siempre muy similares. En 2houses los conocemos y trabajamos para hacer la vida de todos más agradable.

Cómo crear un periodo de custodia equitativa que funcione

Cómo crear un periodo de custodia equitativa

Según The Daily Campus, el 39% de los matrimonios de Estados Unidos acaban en divorcio. Teniendo en cuenta lo común que es, para muchas personas el divorcio es la mejor opción. Dicho esto, divorciarse puede ser más complicado cuando hay niños implicados.

Si está en mitad de un proceso de divorcio, seguramente esté buscando opciones de custodia.

Por ejemplo, un periodo equitativo al 50% o un periodo 3-3-4-4. De esta forma, usted y su expareja pueden hacer lo mejor para ustedes y sus hijos.

Divorciarse puede ser un momento muy difícil, así que lo mejor es hacer todo lo posible para que sea más fácil para los niños. 

Pero ¿cuál es el periodo de custodia que mejor se adapta a su familia? No saber la respuesta hace que estos momentos sean todavía más difíciles y estresantes.

Afortunadamente, el modelo de custodia igualitario al 50% se puede aplicar de varias maneras. En este artículo vamos a revisar los diferentes modelos de custodia compartida al 50% que se puede emplear.

De esta forma, tanto usted y su pareja como sus hijos estarán contentos con el acuerdo. Finalmente, podrán avanzar y comenzar sus nuevas vidas. Siga leyendo para descubrir más.

Factores a la hora de considerar un periodo de custodia igualitario

Antes de ver los diferentes ejemplos de custodia compartida al 50% es importante revisar los factores a tener en cuenta, ya que diferentes soluciones de custodia compartida pueden funcionar mejor dependiendo de usted o su expareja. Los factores a considerar incluyen:

  • Distancia
  • Comunicación
  • Horarios de trabajo
  • Horario de colegio y extraescolares

En términos de distancia, este tipo de custodia funciona mejor si los dos progenitores residen cerca el uno del otro, pues se requieren intercambios frecuentes. Si viven en el mismo barrio o a unas pocas manzanas de distancia puede funcionar fácilmente.

Sin embargo, si viven alejados esta solución se podría complicar. Imagine tener que cruzar la ciudad para dejar al niño, o tener que conducir hasta otro estado cada fin de semana.

Como puede ver, un periodo al 50% es mejor si viven cerca. Si sigue considerando qué periodo escoger puede que sea necesario que lo trate con su expareja ya que se puede encontrar una solución que funcione, por ejemplo, alquilar una habitación cerca de la casa principal.

Comunicación

En este sistema de custodia la comunicación es una pieza clave. Tener una buena relación con su expareja es primordial ya que se verán frecuentemente. Lo último que quiere es que sus hijos vean más conflicto.

Si tiene problemas de comunicación lo mejor es hablar con un profesional. De esta forma, si escogen el periodo de custodia igualitario tendrán unas reglas básicas que seguir.

Adicionalmente, necesitarán comunicarse en caso de que haya problemas que requieran paciencia. Cuando se encuentre con su expareja pueden surgir problemas que estén fuera de su control.

Por ejemplo, reuniones que se alargan o atascos inesperados. Si cree que la comunicación puede ser un problema existen dos opciones.

Primero, puede no seleccionar un periodo de custodia igualitario al 50%. Segundo, si realmente prefiere este sistema porque es mejor para los niños, escoja uno que tenga menos intercambios (más adelante veremos las diferentes opciones)

Horarios de trabajo

Otro factor a tener en cuenta son los horarios de trabajo. ¿Sale tarde del trabajo a menudo? ¿Su expareja trabaja los fines de semana? Esto tendrá un impacto en el modelo equitativo. Tener un calendario compartido puede ayudarle a decidir qué puede funcionar mejor.

Horario de colegio y extraescolares

Por último, hay que considerar el horario escolar y las actividades extraescolares. Un periodo de vacaciones largo puede impactar en el horario. Si uno de los niños termina el colegio antes que otro puede que sea mejor hacer el intercambio durante el fin de semana.

También hay que considerar las actividades extraescolares. El horario de custodia compartida al 50% no debería interrumpir las actividades que esperan a lo largo de la semana.

Para evitarlo, puede ser creativo y encontrar una solución con los siguientes ejemplos. De esta forma, toda la familia estará contenta con el nuevo sistema.

También puede ayudar hablar con sus hijos. Si son pequeños, puede que no sean capaces de involucrarse. Sin embargo, los niños mayores y los adolescentes apreciarán si les tiene en cuenta a la hora de tomar estos acuerdos.

Tenga en cuenta que puede ser muy emotivo para ellos, así que asegúrese de que estén cómodos y receptivos cuando hable con ellos.

Ejemplo 1: semanas alternas

El sistema más sencillo de custodia igualitaria es el horario de semanas alternas. Con este sistema, los niños están una semana con usted y otra semana con su expareja. Los intercambios son mínimos pues ocurren solo una vez a la semana.

A pesar de que hay pocos intercambios, los dos pasarán mucho tiempo con los niños.

Una semana completa le da al niño el tiempo que necesita a su lado. Podrán cenar juntos, compartir actividades y ayudarles con los deberes.

Si el intercambio es durante la semana o los domingos por la tarde, los padres tendrán el fin de semana libre. Si el intercambio ocurre durante el fin de semana, cada padre tendrá un día del fin de semana con los niños.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que este horario es mejor para niños mayores. Esta estabilidad les ayudará a centrarse en sus estudios y actividades, aunque tendrán que ser capaces de gestionar no ver a uno de los padres durante una semana.

Los niños más pequeños, por el contrario, puede que no quieran esperar tanto.

Ejemplo 2: semanas alternas con una pernocta

El sistema de semanas alternas con una pernocta es casi lo mismo que el sistema de semanas alternas. La única diferencia es que, en mitad de la semana, los niños ven a su otro progenitor. A lo largo de un mes sería parecido a esto:

  • Semana 1: niño con el padre A y una visita del padre B 
  • Semana 2: niño con el padre B y una visita del padre A 
  • Semana 3: niño con el padre A y una visita del padre B 
  • Semana 4: niño con el padre B y una visita del padre A 

Este sistema funciona si lo que buscan es un horario sencillo sin estar mucho tiempo sin ver a los niños. Sin embargo, puede ser estresante para ellos, ya que puede que no les resulte fácil adaptarse al hogar donde solo pasan una noche.

Por este motivo, este tipo de modelo de custodia también funciona mejor con niños mayores. Puede que les moleste, pero lo entenderán. Por el contrario, un niño más pequeño no lo comprendería.

Dicho esto, si tiene adolescentes, se sentirán más escuchados si les pregunta su opinión.

Puede que rechacen el horario o que le digan qué noche les viene mejor a ellos. De cualquier forma, estar implicados les ayudará durante la transición.

Tenga en cuenta que, si vive un poco lejos de su expareja, una pernocta a la semana puede ser complicada. Sin embargo, hacerlo durante el fin de semana puede ser una buena solución.

Ejemplo 3: sistema 2-2-3

Otra opción de custodia al 50% es el modelo 2-2-3. Los niños están con el padre A dos noches, después 2 noches con el padre B y finalmente con el padre A durante tres noches. Después se cambia, están con el padre B 2 noches, con el padre A dos noches y finalmente con el padre B 3 noches.

Si tiene niños pequeños este puede ser un buen sistema de custodia ya que no tendrán que pasar mucho tiempo sin ver a ninguno de sus progenitores.

Sin embargo, este sistema tiene algunos problemas. Por un lado, hay más encuentros entre usted y su expareja por lo que pueden surgir más conflictos.

Por este motivo, si escogen este sistema, debería trabajar con su pareja para evitar conflictos. Aunque puede resultar todo un reto merece la pena el esfuerzo.

Si este sistema hace que su hijo sea más feliz, es más sencillo que estos encuentros sean menos hostiles. Además, puede mejorar la comunicación en conjunto y evitar el conflicto. 

Otro problema de este sistema es que los días que tienen a los niños cambian cada semana. Si tiene una agenda ocupada puede que cause algunos conflictos.

Con este sistema, tener un sistema personal flexible es una gran ayuda. Por ejemplo, en vez de hacer yoga solo los lunes se puede comprometer a hacerlo una vez a la semana. También ayuda planificar sus meses con antelación. De esta forma, no le pillará por sorpresa tener que, de repente, recoger a los niños del colegio.

Ejemplo 4: modelo 3-3-4-4

El modelo 3-3-4-4 aporta un poco más de estabilidad a los niños que las semanas alternas ya que verán a los dos padres de forma más regular. Para los padres también es un sistema más sencillo.

Por ejemplo, si el sistema comienza en domingo, los niños estarán con usted de domingo a martes. Después, estarán con su otro progenitor de miércoles a viernes. El único día que se encontrarían para hacer el intercambio sería el sábado.

Con este sistema, podrá ir más al cine, hacer ejercicio y centrarse en el trabajo. Esto no es solo útil para usted sino también para los niños ya que, al estar más organizados, es menos probable que surjan conflictos entre usted y su expareja. También estará menos estresado y será más productivo, algo que sus hijos notarán.

Por último, también será más sencillo seguir las actividades de sus hijos. Al tener un horario más cerrado será menos probable que olvide recogerles de un entrenamiento de fútbol.

Si hay adolescentes, intente evitar, a ser posible, que el intercambio caiga en viernes o sábado. Puede que sea más fácil para ustedes, pero puede molestar a los adolescentes. Ellos también necesitan consistencia en su vida social. Consúltelos antes de implementar este modelo.

Ejemplo 5: modelo 2-2-5-5

Este modelo es igual de beneficioso para los padres que el anterior pues ambos podrán tener una mayor consistencia cada semana. Por ejemplo, digamos que el sistema comienza el domingo.

En este caso, los únicos días que cambian son el sábado y el jueves. Todos los demás días serán iguales, lo que hará que planificar su vida sea más sencillo, incluidas las actividades de los niños. Esto también puede ayudar a los niños a tener una mayor sensación de consistencia.

Sin embargo, tenga en cuenta que estar 5 días sin ver a uno de los padres puede ser un poco intenso para los niños pequeños. En cuanto a los adolescentes, puede que no quieran que el día de cambio sea un viernes o un sábado.

Para asegurarse de que los adolescentes están contentos con el acuerdo, hable con ellos sobre qué día de la semana prefieren.

¿Necesita más información?

Ahora que sabe cómo crear un periodo de custodia igualitario al 50% que funcione puede que necesite más información. A lo mejor quiere saber más sobre otros tipos de custodia en los que el niño está más tiempo con uno de los padres o recibir más consejos sobre comunicación en parejas divorciadas recientemente. Sea cual sea la información que necesite 2houses puede ayudarle.

Puede ayudarle a comunicarse mejor, crear un calendario de crianza común y mucho más. Descubra cómo registrarse en 2houses.

Límites de coparentalidad en las nuevas relaciones

Límites de coparentalidad

¿Sabía que el 16% de los niños estadounidenses viven en familias reconstituidas?

Eso significa que conviven con un progenitor y su nueva pareja. Esta unidad de familia es cada vez más común, por lo que si están a punto de convertirse en una familia reconstituida no están solos.

Las familias reconstituidas pueden ser excelentes para los más pequeños y algunas parejas pueden convertirse en una persona incluso más importante que los padres biológicos. Sin embargo, eso no significa que vaya a ser fácil para usted, su nueva pareja o sus hijos. Uno de los mayores retos de las familias reconstituidas es fijar unos límites de crianza con la nueva pareja.

Afortunadamente, podemos ayudarle. Eche un vistazo a nuestros trucos para establecer límites de crianza en una nueva relación y crear una familia reconstituida feliz.

¿Qué es la coparentalidad?

Antes de pasar a los trucos, veamos primero qué es la coparentalidad.

La coparentalidad es cuando se cría a los hijos con el otro progenitor trabajando juntos en su crianza. Los dos tienen voz en las decisiones y la responsabilidad de cuidar de los pequeños. La coparentalidad debe centrarse por completo en los hijos y normalmente las responsabilidades se comparten por igual.

En las relaciones en las que los dos padres biológicos siguen juntos, esta estructura de coparentalidad suele ser sencilla. Por supuesto, tiene sus dificultades, pero, en general, es un sistema bastante claro. Sin embargo, cuando los padres se divorcian, el sistema se puede complicar.

Uno de los obstáculos a los que se enfrentan muchos padres divorciados o solteros a la hora de criar a sus hijos es la coparentalidad con una nueva pareja. Puede ser difícil ceder la responsabilidad del bienestar de los hijos a alguien que no es su progenitor, y para los pequeños puede ser duro respetar su autoridad. Por ello es tan importante fijar límites y asegurarse de que todos los implicados están felices con la nueva configuración de coparentalidad.

Las tres relaciones

Si tiene hijos y está divorciado o soltero, cuando encuentra una nueva pareja se tiene que encargar de tres relaciones.

La primera es con el otro progenitor. A pesar de que ya no sean pareja, todavía existe una relación y la responsabilidad de tenerle en cuenta en las decisiones de crianza. Su felicidad es esencial para tener una transición suave en la coparentalidad con una nueva relación.

La segunda relación es con la nueva pareja. Puede que le cueste tener un nuevo niño en su vida y hay que intentar que también esté feliz con la dinámica.

La última relación, y realmente la más importante, es con su hijo. Toda esta dinámica se crea para que el niño sea feliz y asegurarse de que su expareja, su nueva pareja y usted representan un beneficio en su vida. Es importante no olvidarse del hijo en la coparentalidad. Más tarde hablaremos de ello.

Por supuesto, no solo estas tres personas tienen que ser felices, ¡usted también debe serlo! Usted también es importante y debe asegurarse de incluirse en su lista de prioridades.

Todas estas relaciones necesitan ser sanas y todos deben sentirse incluidos en el proceso de coparentalidad. A la hora de fijar límites, asegúrese de pensar en cada persona y en cómo le afectará. Veamos a continuación cómo fijar límites sanos con su nueva pareja.

Hable con su expareja

Antes de fijar los límites con su nueva pareja siempre debe hablar primero con el otro progenitor (para que sea sencillo lo llamaremos expareja, aunque puede que no sea el caso). Su expareja debe tener la máxima información sobre cómo se está criando su hijo y siempre se debería hablar antes de introducir una nueva pareja en la dinámica de crianza. Trate cualquier preocupación que su expareja pueda tener y cuánto le gustaría que la nueva pareja se implicase, así como el contacto entre su nueva pareja y su expareja.

Si a su expareja no le gusta que tenga una nueva pareja, limite su contacto. Evite llevarla a los intercambios, no la mencione a menudo e intente no llevarla a eventos, como festivales, hasta que la relación sea seria.

Por el contrario, si tiene una buena relación de amistad con su expareja podrán hablar sobre la coparentalidad de forma más sencilla. Pídale consejo, cuéntele los límites que está pensado en establecer y mantenga la comunicación abierta sobre cómo se va a involucrar la nueva pareja en la vida de los pequeños. A la hora de criar ya tienen experiencia por lo que los consejos de su ex pueden ser muy útiles.

Hable con sus hijos

Las personas más importantes son los hijos. Asegúrese de hablar con ellos antes de introducir una nueva pareja en su vida, y nunca se la imponga. Esto no significa que no pueda tener una relación si a sus hijos no les gusta, simplemente no les obligue a pasar tiempo con ella o a que sean felices con la situación.  Será mucho más fácil si les damos el tiempo que necesiten para adaptarse.

Gestione los cambios poco a poco e implique siempre a los pequeños. Comience con un encuentro corto en el parque o en algún sitio familiar donde los niños se lo pasen bien. Espere a que se acostumbren a su nueva pareja antes de invitarla a casa y asegúrese de que saben que ellos siguen siendo su prioridad.

En cuanto a los límites, puede ser beneficioso discutirlo también con sus hijos, siempre y cuando sean lo suficientemente mayores. Pregúnteles qué tipo de relación esperan tener con su nueva pareja una vez la relación sea más seria, y qué cosas debería evitar su pareja para no sobrepasar sus límites. Sea delicado e informe a su pareja de los sentimientos de sus hijos.

Conozca sus límites

En la coparentalidad es fácil pensar en los demás, pero también debe tener en cuenta sus preferencias. Reflexione sobre qué papel quiere que tenga su pareja en la crianza y cuál es la participación en la vida de sus hijos con la que se siente cómodo. A continuación, hay una serie de preguntas que le ayudarán a establecer los límites: 

  • ¿Dejaría a los niños con su nueva pareja?
  • ¿Le gustaría que educara a sus hijos?
  • ¿Le gustaría que acudiera a las reuniones del colegio de sus hijos?
  • ¿Aceptaría consejos sobre crianza de su nueva pareja?

Averiguar qué papel quiere que juegue su pareja es vital. Si no le apetece que tenga un rol fuerte en la crianza, debería considerar si es justo dejar que se mude a su hogar. Por otro lado, si no le gusta la idea de que eduque a su hijo, ¿es conveniente que pasen tiempo solos?

Una vez haya respondido sus preguntas estará mejor preparado para fijar los límites en la coparentalidad.

Sea honesto con su nueva pareja

Debe ser honesto con su pareja sobre sus hijos desde el principio. Déjele claro que sus pequeños siempre estarán primero y que son su prioridad, y si a su pareja no le gusta considere si la relación merece la pena. No olvide hacerle saber que ella también es una prioridad y que se asegurará de tener suficiente tiempo de calidad para la relación.

Una vez que la relación está afianzada, es hora de abordar el encuentro entre los niños y su pareja. Es una gran oportunidad para ver cómo llevará su pareja el tiempo dividido y hacer cosas en familia. Si le gusta, ¡genial!

Hable sobre cómo irá el encuentro y recuerde a su pareja que no sea demasiado agresiva con los pequeños. Los lazos no suelen formarse de forma inmediata, así que tendrá que ser paciente. Recuerde, solo debe presentar a sus hijos una nueva pareja si es una relación seria, si es así, merecerá la pena esperar a que sus hijos lo acepten.

Pregúntele a su pareja que desea

No todas las parejas querrán implicarse con los niños. A algunas les entusiasmará aceptar la nueva familia y se convertirán en un gran padrastro o madrastra, mientas otras estarán nerviosas y no estarán dispuestas a hacerlo. Antes de avanzar, hable con su pareja de cómo se siente y dígale lo que espera de ella.

Este es el momento de alinear sus pensamientos y ver si están en el mismo punto. Si su pareja desea convertirse en un copadre e involucrarse puede pasar a la siguiente fase y establecer los límites. Si no es así, piense cómo solucionarlo, por ejemplo, viviendo separados hasta que esté lista para mudarse.

Límites en la disciplina

La disciplina es uno de los límites más complejos de negociar. Cada padre tiene una idea de cómo educar a sus hijos, por lo que debe comprobar que su pareja conoce las normas, sino reinará el caos.

Comenten los malos comportamientos del niño que hay que castigar. Por ejemplo, a lo mejor puede que haya un sistema cuando tienen una pataleta porque quieren ver más televisión de la hora establecida. No espere que su pareja asuma su nuevo rol sabiendo cómo tratar a sus hijos, usted tendrá que enseñarle.

 Si su pareja también tiene hijos usted también tendrá que aprender sobre sus técnicas de educación. En la convivencia, necesitaréis estar en el mismo punto sobre qué comportamiento es aceptable y cuál no, y las consecuencias que tienen. Esto es imprescindible para crear un entorno justo para los más pequeños. 

En cambio, si no tiene niños, hablen sobre el papel que tendrá en la educación de su hijo. Asegúrese de que está preparada para educarles en su ausencia, pero fije límites en su participación. Es probable que una pareja muy estricta imponiendo nuevas reglas cause fricciones así que compruebe que no ocurre si no está cómodo con ello.

Qué va a compartir sobre su hijo

A menudo los copadres tienen que compartir mucha información sobre sus hijos, así que confirme que está de acuerdo con esto. Si su nueva pareja va a jugar un papel en la vida de su hijo necesitará estar al día. Si le preocupa olvidarse, utilice un calendario online para mantenerla informada y que se sienta incluida.

Si ya utiliza una herramienta de coparentalidad con su expareja, ¿debería incluir a su pareja? Primero hable con su expareja antes de darle acceso a la herramienta para evitar discusiones.

Sigan comunicándose

Aprender a coparentar se basa en la comunicación. A medida que empiezan su camino, comprueben juntos qué funciona y qué no. También debería hablar con los niños y comprobar si les gusta la nueva dinámica y si desean realizar algún cambio.

Fije los límites de coparentalidad

Para crear una vida familiar armoniosa es vital fijar unos límites de coparentalidad entre todas las personas implicadas en la vida del niño, incluido el niño. Afortunadamente, estos consejos le ayudarán a conseguirlo, pero si necesita más ayuda, puede visitar nuestro blog 2houses donde encontrará más consejos y trucos.

Para que la crianza sea más sencilla, tanto con los progenitores como con las parejas nuevas, asegúrese de visitar nuestras opciones de herramientas colaborativas. Hemos creado opciones para ayudarle a compartir los gastos, mantener informado a los otros padres sobre el progreso del niño y crear una familia más comunicativa incluso después del divorcio.

¿Cómo separar y gestionar los gastos compartidos entre padres divorciados?

los gastos compartidos entre padres divorciados

Los niños son caros. Una familia de clase media gasta 12.980 dólares al año de media por cada hijo. Los gastos crecen a la vez que el niño, gastando unos 900 dólares más al año en los hijos adolescentes.

Estos gastos no desaparecen cuando los padres se separan. Ambos deben contribuir para cubrir las necesidades de sus hijos.

Sin embargo, encontrar una solución para los gastos compartidos es difícil. Muchas personas no quieren hablar con sus exparejas sobre nada, y mucho menos de dinero. Otros no saben qué hacer después de haber tratado el tema.

Comience con lo básico y después desarrolle un plan de parentalidad completo y específico. A continuación, le ofrecemos una guía.

Hable sobre los gastos compartidos con el otro progenitor

Después de una separación es posible que no quiera hablar con su expareja. Concédase tiempo para pensar las cosas y expresar sus sentimientos. Recupere algo de confianza en sí mismo y hable con la gente que quiere, incluidos sus hijos.

Pero deben tener una conversación sobre finanzas. Tan pronto esté preparado, contacte con su expareja y pídale una cita. Puede acudir con su abogado o un amigo si lo prefiere.

Los dos tienen que desglosar todos los gastos de los niños, incluidas las emergencias. Después, deberán decidir cómo se harán cargo de esos gastos.

No hay que decidirlo todo en una sola reunión. El objetivo es tener una idea general de lo que hay que pagar y después pueden consultar con un consultor financiero. A continuación, deberían hacer un seguimiento juntos sobre los siguientes pasos a dar.

Hay que tener en cuenta que la situación financiera va a cambiar. Ambos deben comprender lo que van a pagar y mantenerse flexibles.

No hay que dividir las cosas al 50%. Si uno de los progenitores gana más dinero puede aportar más.

Si llegan a ese acuerdo no tienen por qué contárselo a sus hijos ya que pueden pensar que el padre que paga más los quiere más. No les cuenten qué pasa entre bambalinas, aunque mantengan un contacto diario.

Intente separar las conversaciones sobre la custodia de los niños del resto de los acuerdos. Tratar todos los temas de una sola vez puede ser agotador y llevar a discusiones. Debe tener claro que se pueden dividir los pagos, pero no la custodia.

Escribir un acuerdo

Una vez que hayan llegado a un acuerdo en los términos deberán escribir un acuerdo formal. No hace falta que sea largo, pero sí claro.

Anoten cuales son los gastos de los hijos. A continuación, añadan los detalles de cómo cada uno de ustedes los hará frente, especificando los métodos de pago y cantidades que va a pagar cada uno.

Acuerden que pasará si alguien no realiza el pago. También se debe especificar que pasará en caso de que el niño tenga una emergencia y dejar claro cómo se pagarán los gastos médicos y recursos adicionales.

El debate sobre los gastos compartidos se puede incluir en un plan de parentalidad más amplio. Incluso se puede redactar un documento separado en el que se trate la custodia y las visitas.

Una vez el acuerdo esté redactado envíe una copia a su abogado y consejero financiero para que lo revisen. Si uno de los abogados no está de acuerdo con algo se debería tratar el tema. No modifique el documento por iniciativa propia ya que puede provocar desconfianza en el otro progenitor.

Gestionar la manutención

Si ha establecido un acuerdo exhaustivo con el otro progenitor no necesitará gestionar la manutención de manera formal. Si no es así, puede acudir a los tribunales para gestionarla. Esta es una buena opción para las personas que han estado en una relación abusiva con el otro progenitor.

Hay varios modelos que se pueden utilizar para calcular los pagos. El modelo de ingresos compartidos divide los gastos en base a los ingresos combinados de los padres. Si uno de los progenitores gana 2/3 de los ingresos combinados entonces pagará 2/3 de los gastos.

La manutención normalmente cubre necesidades como alojamiento y comida. Sin embargo, es posible que su acuerdo no incluya gastos adicionales como la electrónica. Intente hablar con el otro padre sobre cómo facilitarles estas cosas.

Mantener el contacto

No hace falta que haya una comunicación diaria, pero debería haber una línea de comunicación abierta en caso de que se necesite ajustar algún pago.

Si no puede hacer frente a un pago un mes deberá avisar a tu expareja por adelantado. Dígale cómo planea cumplir con los gastos. Discúlpese y tome acción para que no vuelva a ocurrir.

Si al niño le ocurre una emergencia debe informar al otro padre lo antes posible. No permita que lo descubra a través de otra persona. Incluso si no tienen la custodia debe saberlo pues tiene un impacto en sus pagos y en la relación de su hijo.

Si no está cómodo hablando con el otro progenitor directamente, puede utilizar un intermediario. Considere pedir ayuda a un amigo en común en vez de un abogado. No use a su hijo para enviar mensajes a su expareja.

No pasa nada si necesita hacer algunos cambios en el plan de parentalidad inicial.

Hable sobre los cambios que desea hacer y compruebe que su expareja está de acuerdo. Realice los cambios tan pronto como sea posible. Si los nuevos términos no están por escrito puede que el juzgado no los acepte.

Gestionar gastos escolares

Si hay un área en el que se deba centrar es en el colegio. Mucha gente considera que el colegio es un gasto insignificante porque la escuela pública es gratuita, pero es más caro y complicado de lo que parece.

Mientras que el colegio en sí puede ser gratuito las actividades extraescolares no lo son. Los deportistas deben comprar su propio equipamiento y los torneos de robótica y oratoria tienen gastos de registro.

Su hijo necesitará carpetas, papeles y lápices con los que escribir. A medida que crecen, necesitarán un ordenador y un teléfono móvil.

Es posible que en verano su hijo quiera ir de campamento. Además, puede que se vayan de vacaciones. Estas actividades cuestan cientos de dólares, sobre todo si lo hacen verano tras verano.

Si el niño es pequeño puede que no necesite un plan formal para cubrir todos estos gastos. Sin embargo, debería tenerlo antes de que comience con las extraescolares, sobre todo en el nivel de primaria.

También debería considerar el dinero para la universidad. Especifiquen cuánto aportará cada uno en el plan parental. Si cree que se puede realizar un mal uso con ese dinero puede solicitar al juez que se deniegue el acceso a la cuenta al otro progenitor.

Tenga presente que la matrícula no es el único gasto de la universidad. También, necesitará cubrir los gastos de mudanza y alojamiento, especialmente si el hijo estudia en otro estado. Especifíquelo también en el acuerdo.

Cómo ahorrar dinero

En la crianza compartida también se puede ahorrar dinero. El domicilio fijo permite juntar el dinero del alojamiento.

La mayoría de los acuerdos de custodia implican que los copadres viven en casas separadas y los niños se alternan entre ellas. El padre que cambia de domicilio suele comprar un set duplicado de las pertenencias del niño para que esté cómodo.

Con el domicilio fijo, los niños están en una casa y los padres se cambian. Esto minimiza los cambios para los niños y evita que haya que comprar cosas por duplicado.

Si el dinero llega justo, los dos padres pueden quedarse en la casa en habitaciones separadas. En esta opción no hay gastos de mudanza. Sin embargo, solo es posible en casos en los que los padres se separen de forma amistosa.

Muchos padres compensan a sus hijos por las molestias comprándoles regalos. Los juguetes caros pueden ofrecer un alivio momentáneo, pero añaden gastos que más tarde le perjudicarán.

Comparta experiencias con sus hijos en vez de cosas. Salgan a dar un paseo juntos por el parque, invite a sus amigos a casa o jueguen juntos a un juego.

Tampoco hay motivos para comprar muebles infantiles caros. Se pueden encontrar opciones más baratas en tiendas de segunda mano o en mercadillos. Eche un ojo a los periódicos locales.

Ambos progenitores deberían contratar un seguro de vida. En caso de que uno de los dos fallezca, el seguro cubrirá los gastos del niño.

Cómo controlar los pagos

Se pueden comprobar los pagos del copadre de diferentes formas. Una aplicación de coparentalidad ofrece un acceso fácil a todos los documentos, incluido el plan de pago. Así mismo, se puede ver un resumen del estado financiero y si las cuentas están al día.

Se puede establecer cuentas de ahorro o líneas de crédito compartidas, así como acceder a las cuentas a través del banco.

No pregunte al copadre cuándo ha pagado, y no le diga que está controlando sus pagos ya que podría molestarse y dejar de realizarlos.

No pagar la manutención de los hijos es un delito y puede resultar en cargos judiciales. Si el copadre se niega a realizar los pagos deberá informar a las autoridades.

Ponga al niño en el centro

Pagar los gastos de los hijos es frustrante. Hablar con su pareja sobre dinero puede conducir a discusiones, por lo que lo mejor es centrarse en el niño. Céntrese en su bienestar y enorgullézcase de los cuidados que le facilita.

No informe a su hijo de las finanzas. Si descubre que tiene problemas para pagar las facturas puede sufrir ansiedad.

Tampoco le cuente al niño el estado de las finanzas del otro progenitor, dígale que los dos van a cubrir sus necesidades y que no debe preocuparse.

El otro copadre puede intentar ganarse el cariño del hijo inundándole de regalos. No haga lo mismo.

Tenga una conversación con su expareja en privado. Dígale que usted también puede pagar los juguetes y regalos. Incluso podrían intentar hacer un regalo conjunto.

Es posible que después de la separación el niño necesite hablar con alguien. Puede acudir al psicólogo o psiquiatra, concédanle todo el tiempo que necesite para construir su confianza y autoestima.

A medida que el niño crezca puede que tenga algún trabajo. No esperen que el niño aporte a sus propios gastos. Lo mejor es que ahorre el dinero para su propia vida y para las cosas que quiera comprar.

Es probable que deba mantener a su hijo aunque sea mayor de edad. Menos del 25% de los adultos jóvenes son financieramente independientes. Puede que tenga que ayudarle incluso después de que se vaya de casa, compruebe que tiene los recursos necesarios.

Discuta los términos con su nueva pareja

Puede que poco después de la separación tenga una nueva pareja. Evite presentársela a sus hijos al principio. Si puede espere al menos un año.

Mientras tanto, hable sobre su plan de parentalidad con su pareja. Puede ser difícil equilibrar la crianza compartida y las citas por lo que es mejor que su pareja sepa en qué situación se encuentra.

Puede que su pareja esté dispuesta a tener un papel en la crianza de sus hijos. En ese caso, dígale las obligaciones financieras que tiene con ellos.

No espere que su pareja pague la manutención de sus hijos. Es posible que pague una comida o un juguete. Son usted y su expareja quienes deben hacerse cargo de los gastos principales de sus hijos.

Si tiene un hijo con su nueva pareja puede que necesite reconsiderar esos pagos. Sin embargo, sigue siendo responsable de mantener a su hijo mayor. Asegúrese de que tiene dinero para cubrir todos los gastos.

Si un progenitor tiene una pareja que está dispuesta a pagar los gastos, se puede ajustar el plan de parentalidad. Pueden dividir los gastos entre ellos, aunque no debería esperar una reducción de sus propios pagos.

La forma correcta de dividir los gastos compartidos

Puede dividir los gastos compartidos sin mayores problemas. Cuando esté listo, tenga la conversación con su expareja. Trabajen en un plan de parentalidad formal en el que se incluya todo lo que debe pagar.

Mantenga una línea de comunicación con el otro copadre y modifique el plan a medida que sea necesario.

Mantenga el foco en su hijo. No le facilite información que podría preocuparle. Introduzca una nueva pareja si ésta desea asumir un papel en la crianza.

Conviértase en un gran padre con los hechos. 2houses ofrece guías específicas. Lea nuestras guías para más consejos sobre crianza.

Custodia compartida: cómo mantener el contacto con su hijo cuando no está con usted

Custodia compartida

La separación nunca es fácil y es doblemente verdad cuando tiene que comunicarse con su hijo. Si es un copadre, hay una multitud de opciones para estar en contacto con los niños cuando están fuera. ¡La tecnología moderna ha hecho que la comunicación sea más fácil que nunca!

Algo más que tecnología

Es natural querer mantener un contacto regular con los hijos cuando están fuera. Dicho esto, se debe buscar un equilibrio entre el contacto constante y la libertad sin límites. Póngase en el lugar de su expareja: ¿le gustaría que llamara a los niños cada poco tiempo cuando es “su” turno?

Lo último que debe hacer es merodear demasiado cerca. Después de todo es una coparentalidad: ¡deje que sus hijos pasen su tiempo con el otro progenitor! Permitir que los niños tengan sus momentos con el otro padre es normal y saludable.

El primer paso para mantener el contacto con los niños mientras estos están fuera es establecer una serie de normas básicas con su antiguo cónyuge. Por ejemplo:

  • Decida si prefieren hacer llamadas programadas.
  • Establezca límites (cuánto tiempo hablando con el otro padre es demasiado).
  • Decida cómo gestionar la comunicación en las visitas más largas.

Programar llamadas de teléfono regulares

Puede parecer un sacrilegio para las generaciones más jóvenes, pero los teléfonos existen para algo más que enviar mensajes. Fijar un horario de llamadas regular con los niños es una forma estupenda de ser un elemento consistente en sus vidas. Por ejemplo, si el acuerdo de custodia es por periodos equivalentes, suele ser suficiente con una llamada cada pocos días.

Realice videollamadas

Las llamadas de voz obran milagros, pero ver la cara de alguien coloca la conversación en un nuevo nivel. Nunca había sido tan fácil establecer una videollamada, (considere FaceTime, Skype y Facebook Messenger), así que siéntase libre para acoger esta tecnología. ¡Sus hijos se lo agradecerán!

Los mensajes son consistentes

Enviar mensajes es un modo de vida y por una buena razón: ¡es práctico! El contacto regular con mensajes es sencillo, flexible y adecuado para la mayoría de las conversaciones ordinarias. Los mensajes son mucho menos intensos que una llamada de teléfono y son por naturaleza informales. Como tal, es genial para mantener el contacto con detalles menores (¿cómo fue la película?) y no resta valor al tiempo de los progenitores con los niños.

Por supuesto, puede resultar tentador excederse a la hora de enviar mensajes y esperar un flujo constante de mensajes. Intente por todos los medios de evitarlo, a nadie le gusta un padre helicóptero, y recuerde que el tiempo de su expareja es tan valioso como el suyo. Cuanta más libertad y flexibilidad les ofrezca a sus hijos mejor será la relación.

Incluya a su antiguo cónyuge

Imagine organizar un juego de mesa una noche y descubrir que sus hijos tienen una videollamada con su antiguo cónyuge. Este tipo de sorpresas son desagradables para los dos padres.

Tómese el tiempo necesario para informar al otro progenitor en cómo se puede utilizar la tecnología para mantener el contacto. Establecer unos límites firmes es una gran forma de asegurarse de que la tecnología ayuda (y no distrae) a su relación de crianza. Por ejemplo, evite las llamadas durante las visitas nocturnas en las que se pueda producir un sentimiento de morriña. Del mismo modo, evite preguntar demasiado sobre el otro padre durante las conversaciones: céntrese en su hijo, no en su expareja.

Mantener el contacto no debería ser una obligación

Haga que mantener el contacto con los niños mientras están fuera de casa sea algo natural. Para comenzar, hable con su expareja y establezca una serie de normas. Entre las llamadas de teléfono, las videollamadas y los textos hay muchas opciones para mantener el contacto.

Asegúrese de respetar el tiempo de crianza del otro progenitor y sus hijos le querrán por ello aún más.

Guía de coparentalidad: qué es un modelo de custodia compartida 70/30

custodia compartida 70/30

Todos los padres separados quieren el mejor modelo de crianza compartida. Pero ¿cuál es la mejor manera de gestionar el horario de custodia compartida?

El modelo de custodia al 70/30 es un modelo popular por diferentes motivos, entre ellos que permite tener un domicilio principal para los hijos. También funciona bien cuando uno de los progenitores reside fuera.

Si está considerando cuál es el modelo de custodia ideal, ¡el modelo 70/30 puede ser el mejor! Siga leyendo para saber más.

¿Qué es el modelo de custodia 70/30 y por qué es tan popular?

Este modelo de custodia permite al niño pasar el 70% de su tiempo con un progenitor y el 30% con el otro, facilitando que ambos adultos se puedan involucrar en el tiempo y vida de su hijo.

Este periodo funciona muy bien en los casos en que los padres viven lejos, ya que al residir más tiempo con uno de ellos se limita el número de intercambios para el niño de un domicilio a otro.

Así mismo, también funciona si uno de los padres está más ocupado que el otro porque tiene un trabajo más demandante o porque viaja a menudo. Al progenitor con el domicilio principal y que tiene al niño el 70% del tiempo se le considera el progenitor “principal”.

Encontrar el modelo adecuado para su familia puede ser un proceso complicado, pero no tiene que ser una experiencia negativa. Cuando los dos padres están comprometidos a la hora de encontrar un modelo que ofrezca al niño lo mejor de una vida consistente y feliz la logística se convierte en otro detalle que solucionar.

¿Cuántas pernoctas puede esperar?

Un aspecto importante para la logística de la familia es la cantidad de noches que pasan los hijos con cada progenitor con el modelo 70/30.

En este periodo hay cuatro noches con el progenitor no principal, lo que se traduce en más tiempo que con el modelo de “fines de semana alternos”.

Hay diferentes horarios que se pueden utilizar para el acuerdo de custodia 70/30. Sin embargo, hay varios factores importantes que considerar antes de escoger el horario que mejor funcione para usted y su familia.

Factores para escoger horario

El primer factor a tener en cuenta es la consistencia. ¿Cuál es la mejor forma de asegurar que el niño tenga una vida cotidiana consistente? Al mismo tiempo, ¿cómo pueden los dos padres tener un horario consistente con su trabajo y vida personal?

También deberá discutir con el otro progenitor sobre los intercambios y la comunicación general. Es muy importante que los padres separados sean capaces de hablar sobre los mejores métodos para intercambiar a los niños para que este sea un momento feliz y fácil.

No se olvide de hablar sobre la rutina del niño. ¿Encaja el horario de custodia con el resto de las rutinas diarias del niño, como guardería o deportes?

Más importante aún, el niño estará lejos de uno de los padres un largo periodo de tiempo, téngalo en cuenta en su horario a la hora de dividir el tiempo.

Horarios comunes para compartir tiempo

El modelo 70/30 se puede configurar de diferentes maneras. Dentro del modelo hay cuatro versiones habitales que incluyen todos los fines de semana, fines de semana alternos 5-2, la tercera semana y cada tercer día.

Siga leyendo para ver el desglose de cada uno de estos horarios.

Los fines de semana

Este horario permite al padre principal disfrutar de los días de entre semana mientas el otro padre disfruta de los fines de semana. Esto implica que el progenitor no principal tiene menos tiempo, pero el horario de fines de semana permite una gran consistencia.

Además, dependiendo de la edad del niño, puede que entre semana esté en el colegio. Intercambiar al niño los fines de semana ayuda a no romper la rutina escolar.

Este horario también es útil porque permite al progenitor no principal tener más tiempo con el niño durante los fines de semana puesto que no hay colegio, lo que compensa la diferencia de tiempo.

La opción de todos los fines de semana también funciona para familias con un padre que trabaja o viaja los fines de semana, aunque no es la única opción.

Fines de semana alternos 5-2

Este es otro método para gestionar el modelo de custodia 70/30 y que aporta más flexibilidad que el anterior. Esta es una gran opción si los dos padres quieren pasar tiempo con sus hijos el fin de semana, o si uno de ellos desea tener libres algunos findes.

La opción de los fines de semana alternos 5-2 puede comenzar cualquier día de la semana. Los niños pasarán cinco noches con el progenitor principal y dos noches con el otro padre.

Este modelo dependerá de qué es mejor para el niño ya que se adapta mejor a los niños que no están en edad escolar. De esta forma, sus rutinas diarias se ven menos interrumpidas y cada padre puede pasar tiempo con su hijo en los años con mayor desarrollo.

Cada tres semanas

Este horario es ideal para padres que quieren pasar largos periodos de tiempo con sus hijos. Al utilizar este horario, el niño vive con el progenitor principal durante dos semanas y con el secundario la tercera semana.

Este horario implica que el segundo padre estará dos semanas sin ver a los niños, algo que puede no funcionar en todas las familias. Sin embargo, si un padre vive lejos y el niño no está en edad escolar, esta puede ser una gran opción.

Si el niño está en edad escolar, se recomienda que ambos progenitores vivan lo suficientemente cerca del colegio y de las actividades del niño. Esto ayuda a reducir las interrupciones en la vida de menor.

Aquí la comunicación entre los padres es clave. Puesto que el niño va a pasar un periodo de tiempo mayor con uno de ellos, es importante hablar sobre lo que ha ocurrido cuando el niño estaba con el otro padre.

Si el niño es pequeño, puede que alcance ciertos hitos mientras está en la guarda de un padre, como gatear o hablar. Este será un momento excitante para los dos padres que requiere mucha comunicación.

Si su hijo es mayor, su personalidad le ayudará a decidir si es la opción adecuada. Su hijo puede disfrutar pasando mucho tiempo con cada padre, o puede que le resulte difícil estar separado de uno de ellos durante muchos días o semanas. Esto podría causarle ansiedad por lo que hablarlo con él puede ser una buena estrategia.

Cada tercer día

La última versión del modelo 70/30 es hacer una transición frecuente con cada padre el tercer día. Este horario solo funcionará si al niño no le importa cambiar de casa de forma frecuente.

Con este horario, el progenitor principal, o padre A, tendrá al niño dos días, después el otro padre, padre B, lo tendrá un día. El niño volverá entonces con el padre A.

Esto puede funcionar fácilmente si los padres viven cerca y tienen horarios de trabajo similares. También es importante que mantengan una buena relación, pues este tipo de horario implica mucha comunicación y transiciones.

Escoger el horario que mejor funcione con el niño puede ser un reto. Todos pueden ser una opción viable, pero es importante descubrir cuál es la mejor para su situación particular.

Modelo de custodia compartida 70/30 en base a la edad

La edad del niño es un factor importante a la hora de decidir el sistema de custodia para la familia. Si el niño es un bebé, será importante estar con su madre más tiempo, especialmente si tiene lactancia materna.

Esto también significa que cualquier opción que implique un tiempo alejado del progenitor principal no sea lo mejor para el bebé. La opción de cada tercer día puede ser la mejor para que el niño no esté lejos de su madre más de una noche a la vez.

Si el niño ya camina, hay un poco más de flexibilidad. La opción de cada fin de semana suele ser popular para estas edades pues es consistente y permite al niño saber lo que le espera. Este tipo de consistencia también permite a los niños adaptarse a la separación de los padres.

Para niños en edad escolar, es aconsejable trabajar con el otro progenitor para encontrar un horario que se ajuste al colegio y actividades del menor. Si uno de los padres reside lejos y el niño tiene deporte u otra actividad los fines de semana, la opción de fines de semana alternos 5-2 podría funcionar.

Así mismo, ya que las necesidades del niño cambiarán a medida que crezca, el sistema también debería cambiar. Estar en contacto frecuente con el otro padre le permitirá discutir qué es lo mejor para el menor durante las diferentes etapas de su vida. Esto también les mantendrá flexibles y más dispuestos a adaptarse a las necesidades de su hijo.

¿Qué más debería saber antes de elegir?

A parte de la edad, hay más cosas que considerar antes de adoptar el modelo 70/30, como comprobar que cumple la legislación de su estado. Aunque los padres puedan escoger el modelo que más les beneficie, es importante asegurarse de que cumplen con la legislación vigente relativa a la custodia compartida de su estado.

Por otro lado, aparte de cubrir las necesidades de los niños en base al horario escolar, también debe cubrir las necesidades emocionales, físicas y de desarrollo del niño. Por ejemplo, si tiene un adolescente, su horario social es un factor que debe considerar.

Anteriormente, se ha mencionado que la localización puede afectar a la hora de escoger una opción. Si los padres viven cerca, será más fácil escoger un horario que implique intercambios más frecuentes.

Si un padre reside en otro estado, las cosas se complican para el sistema 70/30. Crear un equilibrio y mantener la consistencia siguen siendo importantes, pero será más complicado si el niño tiene que viajar lejos. Así mismo, ambos padres tienen que comprender la legislación de cada estado para cumplir con la ley.

¿Qué pasa si no hay acuerdo en el modelo 70/30?

En el mejor escenario ambos progenitores estarán en la mejor posición para criar a sus hijos. En una situación ideal, se comunican de forma sencilla y el niño puede seguir los cambios de custodia de forma sencilla.

Sin embargo, algunos padres, especialmente los separados, tienen problemas para poner sus diferencias a un lado y encontrar el acuerdo apropiado y el modelo que mejor funciona para todos. Si no pueden llegar a un acuerdo, pueden utilizar un acuerdo de custodia estándar.

Este tipo de acuerdo le dará al padre que no tiene la custodia principal una tarde a la semana y fines de semana alternos. El resto del tiempo lo pasará con el padre que tiene la custodia, también conocido como padre principal.

Claramente, es mejor que los dos progenitores estén involucrados en la toma de decisión para lograr un acuerdo más personalizado. De esta forma, también se podrá ajustar el acuerdo fácilmente a medida que el niño crece.

Consiga ayuda para crear su modelo 70/30

Desarrollar el modelo de custodia 70/30 correcto puede ser un reto. Es importante considerar todos los factores importantes a la hora de decidir que funcionará mejor, pero también puede conseguir ayuda para que organizar su sistema sea más sencillo.

Visite la aplicación 2houses para recibir más ayuda a la hora de crear su sistema y cumplir con los periodos de custodia.